Bienvenidos a orar los unos por los otros.




Es una fórmula muy sencilla para hacer que el mundo se una en un gran abrazo de paz con la oración que más le gusta a la virgen: la meditación del rosario. Se llama rosario viviente porque es un rosario hecho de muchas personas, hombres, mujeres y niños que dispuestos a compartir la alegría de su fe, ruegan al señor unos por otros, multiplicando el amor en cada avemaría y padrenuestro, disfrutando del evangelio que es palabra que da vida en cada misterio.
Para conseguir este fin se organizan grupos de 15 personas, comprometiéndose cada una a recitar diariamente a la hora que desee una decena del rosario, meditando el misterio que le toca.

Todo lo bueno viene de Dios, por eso el Espíritu Santo fue quien le inspiró esta fabulosa idea a una jovencita francesa llamada Paulina Jaricot,fundadora también de la Obra de la Propagación de la Fe, quien con gran devoción a la Virgen y preocupación por la conversión de los pecadores con el gran sentido misionero, en 1826 funda el Rosario Viviente para propagar en la Iglesia esta forma de oración.
Cada país tiene su casa misionera con su respectivo correo electrónico a la que deben acudir dependiendo de donde vivan para solicitar ser miembro del rosario viviente. En la pagina del rosario viviente latinoamericano https://www.facebook.com/home.php#!/kariliam y en este blog podrán encontrar un link que los llevara directamente a cada casa misionera. Las personas que deseen formar parte de esta bella misión deben de ponerse en contacto por los correos electrónico y expresar su deseo de ser un miembro activo y comprometido con el rezo del misterio que le sea asignado, allí deberán dejar los datos requeridos para su inscripción.
Gracias por tu visita y seas bendecido en el nombre de Jesús y María.














Ven espíritu santo llena los corazones de tus fieles, enciende en ellos el



fuego de tu amor, envía tu espíritu y todo será creado y renovaras la faz de la



tierra. Oh dios que has instruido los corazones de tus fieles, a la luz



del espíritu santo, concédenos que sintamos rectamente con el



mismo espíritu y gocemos de sus divinos consuelos por Cristo nuestro señor.



Amén.



San miguel arcángel, defiéndenos en la batalla se nuestro auxilio contra la



perversidad y acechanzas del demonio, reprímale, suplicantes te pedimos, y



tu príncipe de la milicia celestial con tu divino poder arroja al infierno



a Satanás y todos los espíritus inmundos que andan por el mundo para



la perdición de las almas. Amén.



Oración a María



Reina de los ángeles ¡oh augusta reina de los cielos



y señora de los ángeles!



pues habéis recibido de dios el poder y la misión de aplastar la cabeza de la



serpiente infernal; dignaos escuchar benigna las súplicas que humildemente os



dirigimos; enviad las santas legiones para que, bajo vuestras órdenes, combatan



a los demonios, donde quiera repriman su audacia y los persigan hasta precipitarlos al abismo.



¿quién como Dios?



Santos ángeles y arcángeles, defendednos y guardadnos. ¡Oh buena y tierna madre!



vos seréis siempre nuestro amor y nuestra esperanza. ¡Oh divina madre!



enviad los santos ángeles para defendernos y rechazar lejos al demonio, nuestro mortal



enemigo.



Amén.




Oración a María



Reina de los Ángeles ¡Oh Augusta Reina de los Cielos



y Señora de los Ángeles!



Pues habéis recibido de Dios el poder y la misión de aplastar la cabeza de la



serpiente infernal; dignaos escuchar benigna las súplicas que humildemente os



dirigimos; enviad las santas legiones para que, bajo vuestras órdenes, combatan



a los demonios, donde quiera repriman su audacia y los persigan hasta precipitarlos al abismo.



¿Quién como Dios?



Santos Ángeles y Arcángeles, defendednos y guardadnos. ¡Oh buena y tierna Madre!



Vos seréis siempre nuestro amor y nuestra esperanza. ¡Oh divina Madre!



Enviad los Santos Ángeles para defendernos y rechazar lejos al demonio, nuestro mortal



enemigo.



Amén.












martes, 5 de julio de 2011

Vida y milagros de Santa Filomena- patrona del Rosario Viviente



                                                                              


Joven mártir de cuya vida se conoce poco, salvo las inscripciones en su tumba y los restos mortales que en ella fueron encontrados



Poco se sabe históricamente de Santa Filomena. Su historia real comienza cuando sus santos restos mortales fueron encontrados en la oscuridad de las Catacumbas de Santa Priscila en las que descansaron hace unos mil setecientos años.


Filomena, una joven mártir de la Iglesia primitiva durmió en el olvido de la historia hasta el hallazgo de sus restos mortales el 24 de mayo de 1802. Ocurrió en el día de María Auxiliadora, durante una de las excavaciones que se hacen constantemente en Roma. La encontraron en la Catacumba de Santa Priscilla, en la Vía Salaria.


En una tumba habían tres losas juntas que cerraban la entrada y en ellas había una inscripción que estaba rodeada de símbolos que aludían al martirio y a la virginidad de la persona ahí enterrada. Los símbolos eran: ancla, tres flechas, una palma y una flor.


La inscripción decía: LUMENA PAXTE CUM FI


Se entiende que estas losas pueden haber sido puestas, en el orden incorrecto, debido a la prisa o al poco conocimiento del latín del obrero. Por lo tanto, la inscripción correctamente puesta se leería: PAX TECUM FILUMENA en español: ¡Paz sea contigo Filomena!


Al abrir la tumba descubrieron su esqueleto que era de huesos pequeños y notaron a la vez, que su cuerpo había sido traspasado por flechas. Al examinar los restos los cirujanos atestiguaron la clase de heridas que la joven mártir recibió y los expertos coincidieron en calcular que la niña fue martirizada entre la edad de 12 o 13 años.


Pero Dios es maravilloso en sus santos, y Santa Filomena de modo impresionante ejemplifica esta frecuente y repetida verdad. Después de permitir que su nombre y su memoria fueran sepultados por siglos junto a sus restos mortales, Él atrajo la atención de la Humanidad hacia esta pequeña doncella mártir, y ahora obra asombrosos prodigios en nombre de ella, como si deseara mostrar de esta manera, que Él quiere recompensar el largo tiempo que permitió que ella permaneciera en la oscuridad.


Las reliquias de Santa Filomena fueron desenterradas a principios de siglo XIX, el 24 de Mayo de 1802. El emblema del lirio y la palma estaba grabado en el sepulcro de la santa para indicar su virginidad y su martirio. También había un ancla, un látigo, y tres flechas, dos apuntando en dirección opuesta, y una con la línea curvada en ella, significando fuego e intentando simbolizar los diferentes tormentos que la mártir sufrió en testimonio de su fe y amor a Jesucristo.


Santa Filomena fue formalmente elevada a los altares por Su Santidad el Papa Gregorio XVI en una infalible declaración hecha pública en nombre de la Santa Madre Iglesia para edificación de todos los fieles y para Gloria de Dios en el tiempo y en la Eternidad.


El mismo Papa fue testigo de la curación milagrosa de Pauline Jaricot, fundadora del Rosario Viviente, en el Santuario de Santa Filomena en Mugnano, Italia.


La historia de la vida de Santa Filomena está basada en revelaciones privadas hechas por la santa en 1863 a tres personas diferentes, en respuesta a las oraciones de varios devotos de Santa Filomena, para permitirles que sepan saber quién era ella y como hizo frente al martirio.


Esas personas favorecidas eran un joven artista de buena moral y piadosa vida, un celoso sacerdote y una devota monja de Nápoles, la Venerable Madre María Luisa de Jesús. La Santa Sede no garantizó la autenticidad de las pretendidas revelaciones, el Santo Oficio dio su autorización para su difusión el 21 de Diciembre de 1883.


Nuestra bella Santa Filomena salió de los brazos de su madre para morir por Cristo, los lictores (Magistrados de Justicia de la antigua Roma) han cortado con el hacha el joven lirio y piadosas manos la han recogido para depositarla en el sepulcro. Esta verdadera heroína pisoteó toda la vanidad del mundo debajo sus pies y eligió los múltiples tormentos en lugar de renunciar a sus votos por Nuestro Salvador Crucificado. ¡Qué modelo de constancia y de toda virtud! Animémonos a ir a ella cuando seamos probados. ¡Permitámonos todos con ilimitada confianza implorar su intercesión!


El 14 de febrero de 1961, la Sagrada Congregación de Ritos eliminó el día de la fiesta de Santa Filomena del Calendario Litúrgico. Además, reemplazó la Misa "Proper" (Propia) del culto para sustituirla por la Misa del Común de Mártires. Esto se hizo porque se consideró que no existen pruebas históricas de su existencia. Sin embargo el culto en ámbito privado continúa y en muchos lugares se celebra su fiesta el 11 de agosto. El santo Cura de Ars, que tenía gran devoción a las apariciones de La Salette, también era gran devoto de Santa Filomena.

Historia de la vida según las revelaciones a la Madre María Luisa de Jesús

"Yo soy la hija de un príncipe que gobernaba un pequeño estado de Grecia. Mi madre era también de la realeza. Ellos no tenían niños. Eran idolatras y continuamente ofrecían oraciones y sacrificios a sus dioses falsos. Un doctor de Roma llamado Publio, vivía en el palacio al servicio de mi padre. Este doctor había profesado el cristianismo. Viendo la aflicción de mis padres y por un impulso del Espíritu Santo les habló acerca de nuestra fe y les prometió orar por ellos, si consentían a bautizarse. La gracia que acompañaba sus palabras, iluminaron el entendimiento de mis padres y triunfó sobre su voluntad. Se hicieron cristianos y obtuvieron su esperado deseo de tener hijos.


Al momento de nacer me pusieron el nombre de Lumena, en alusión a la luz de la fe, de la cual era fruto. El día de mi bautismo me llamaron Filumena, hija de la luz (filia luminis) porque en ese día había nacido a la fe. Mis padres me tenían gran cariño y siempre me tenían con ellos. Fue por eso que me llevaron a Roma, en un viaje que mi padre fue obligado a hacer debido a una guerra injusta.


Yo tenia trece años. Cuando arribamos a la capital nos dirigimos al palacio del emperador y fuimos admitidos para una audiencia. Tan pronto como Dioclesiano me vio fijo los ojos en mi.


El emperador oyó toda la explicación del príncipe, mi padre. Cuando este acabó y no queriendo ser ya más molestado le dijo: yo pondré a tu disposición toda la fuerza de mi imperio. Yo solo deseo una cosa a cambio, que es la mano de tu hija. Mi padre deslumbrado con un honor que no esperaba, accede inmediatamente a la propuesta del emperador y cuando regresamos a nuestra casa, mi padre y mi madre hicieron todo lo posible para inducirme a que cediera a los deseos del emperador y los suyos. Yo lloraba y les decía: ¿Ustedes desean que por el amor de un hombre yo rompa la promesa que he hecho a Jesucristo? Mi virginidad le pertenece a Él y yo ya no puedo disponer de ella.


Pero eres muy joven para ese tipo de compromiso -me decían- y juntaban las más terribles amenazas para hacerme que aceptara la mano del emperador.


La gracia de Dios me hizo invencible. Mi padre no pudiendo hacer al emperador ceder y para deshacerse de la promesa que había hecho, fue obligado por Dioclesiano a llevarme a su presencia.


Antes tuve que soportar nuevos ataques de parte de mis padres hasta el punto, que de rodillas ante mi, imploraban con lágrimas en sus ojos, que tuviera piedad de ellos y de mi patria. Mi respuesta fue: No, no, Dios y el voto de virginidad que le he hecho, esta primero que ustedes y mi patria. Mi reino es el Cielo.


Mis palabras los hacía desesperar y me llevaron ante la presencia del emperador, el cual hizo todo lo posible para ganarme con sus atractivas promesas y con sus amenazas, las cuales fueron inútiles. El se puso furioso e, influenciado por el demonio, me mandó a una de las cárceles del palacio donde fui encadenada. Pensando que la vergüenza y el dolor iban a debilitar el valor que mi Divino Esposo me había inspirado. Me venía a ver todos los días y soltaba mis cadenas para que pudiera comer la pequeña porción de pan y agua que recibía como alimento, y después renovaba sus ataques, que si no hubiera sido por la gracia de Dios no hubiera podido resistir.


Yo no cesaba de encomendarme a Jesús y su Santísima Madre.


Mi cautiverio duró treinta y siete días, y en el medio de una luz celestial, vi a María con su Divino Hijo en sus manos, la cual me dijo: "Hija, tres días más de prisión y después de cuarenta días, se acabará este estado de dolor." Las felices noticias hicieron mi corazón latir de gozo, pero como la Reina de los Angeles había añadido, dejaría la prisión, para sostener un combate más terrible que los que ya había tenido. Pasé del gozo a una terrible angustia, que pensaba me mataría. Hija, ten valentía, dijo la Reina de los Cielos y me recordó mi nombre, el cual había recibido en mi Bautismo diciéndome: "Tu eres LUMENA, y tu Esposo es llamado Luz. No tengas miedo. Yo te ayudaré. En el momento del combate, la gracia vendrá para darte fuerza. El ángel Gabriel vendrá a socorrerte, Yo le recomendaré especialmente a él, tu cuidado".


Las palabras de la Reina de las Vírgenes me dieron ánimo. La visión desapareció dejando la prisión llena de un perfume celestial.


Lo que se me había anunciado, pronto se realizó. Dioclesiano perdiendo todas sus esperanzas de hacerme cumplir la promesa de mi padre, tomó las decisión de torturarme públicamente y el primer tormento era ser flagelada. Ordenó que me quitaran mis vestidos, que fuera atada a una columna en presencia de un gran número de hombres de la corte, me hizo que me latigaran con tal violencia, que mi cuerpo se bañó en sangre, y lucía como una sola herida abierta. El tirano pensando que me iba a desmayar y morir, me hizo arrastrar a la prisión para que muriera.


Dos ángeles brillante con luz, se me aparecieron en la oscuridad y derramaron un bálsamo en mis heridas, restaurando en mi la fuerza, que no tenía antes de mi tortura.


Cuando el emperador fue informado del cambio que en mi había ocurrido, me hizo llevar ante su presencia y trato de hacerme ver que mi sanación se la debía a Júpiter el cual deseaba que yo fuera la emperatriz de Roma. El espíritu Divino, al cual le debía la constancia en perseverar en la pureza, me llenó de luz y conocimiento, y a todas las pruebas que daba de la solidez de nuestra fe, ni el emperador ni su corte podían hallar respuesta.


Entonces, el emperador frenético, ordenó que me enterraran, con un ancla atada al cuello en las aguas del río Tiber. La orden fue ejecutada inmediatamente, pero Dios permitió que no sucediera.


En el momento en el cual iba a ser precipitada al río, dos ángeles vinieron en mi socorro, cortando la soga que estaba atada al ancla, la cual fue a parar al fondo del río, y me transportaron gentilmente a la vista de la multitud, a las orillas del río.


El milagro logró que un gran número de espectadores se convirtieran al cristianismo.


El emperador, alegando que el milagro se debía a la magia, me hizo arrastrar por las calles de Roma y ordenó que me fuera disparada una lluvia de flechas. Sangre brotó de todas las partes de mi cuerpo y ordenó que fuera llevada de nuevo a mi calabozo. El cielo me honró con un nuevo favor. Entré en un dulce sueño y cuando desperté estaba totalmente curada. El tirano lleno de rabia dijo: Que sea traspasada con flechas afiladas. Otra vez los arqueros doblaron sus arcos, cogieron toda sus fuerzas, pero las flechas se negaron a salir. El emperador estaba presente y se puso furioso y pensando que la acción del fuego podía romper el encanto, ordenó que se pusieran a calentar en el horno y que fueran dirigidas a mi corazón. El fue obedecido, pero las flechas, después de haber recorrido parte de la distancia, tomaron la dirección contraria y regresaron a herir a aquellos que la habían tirado. Seis de los arqueros murieron. Algunos de ellos renunciaron al paganismo y el pueblo empezó a dar testimonio público del poder de Dios que me había protegido. Esto enfureció al tirano. Este determinó apresurar mi muerte, ordenando que mi cabeza fuera cortada con un hacha.


Entonces, mi alma voló hacia mi Divino Esposo, el cual me puso la corona del martirio y la palma de la virginidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.